miércoles, 17 de septiembre de 2008

El dinero de la formación profesional

De irresponsabilidad, cuando no de ineficacia, cabe calificar que el Ministerio de Trabajo haya dejado de invertir 837 millones de euros en formación profesional, durante los últimos cuatro años, y los haya destinado a reducir el déficit público. Nadie discute la necesidad de contribuir a sanear las cuentas públicas, pero tampoco hay ninguna duda de la absoluta prioridad de la formación profesional como fórmula para propiciar un aumento del empleo y también de su calidad.

Los citados 837 millones de euros constituyen prácticamente el 18% del presupuesto de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo, de la que forman parte el Ministerio de Trabajo, la patronal y los sindicatos, y que tiene por misión gestionar la formación continua de los trabajadores. El presupuesto de esta institución entre el 2004 y el 2007 ha sido de 4.790,2 millones, pero sólo se ejecutaron 3.952,5 millones.

Los recursos destinados a la formación profesional continua proceden de las cotizaciones sociales que pagan trabajadores y empresarios y, por tanto, deberían destinarse íntegramente a la función para la que han sido recaudados, no sólo porque eso es lo que corresponde administrativamente sino porque la economía española necesita imperiosamente mejorar la formación laboral para aumentar la calidad del empleo y diversificar las oportunidades de trabajo. Por todo ello resulta injustificable que se hayan dejado de invertir los citados 837 millones de euros en formar a trabajadores españoles, sobre todo desde una institución en la que también participan sindicatos y patronales.

El Ministerio de Trabajo, o en su caso los responsables de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo, deberían dar explicaciones de las causas que explican su renuncia a ese dinero en beneficio de las arcas públicas y en detrimento de una mejor preparación laboral de los españoles, con objeto de poder valorar si ello es fruto de ineficacia en la gestión, de la falta de demanda o de la inadecuación entre los cursos que se ofrecen y las verdaderas necesidades del mercado. Lo lógico, dada la situación de la economía española, es que hubiera hecho falta más dinero para la formación laboral, dados los bajos índices de productividad que registra España y las constantes quejas de los empresarios de numerosos sectores de que no encuentran trabajadores preparados.

Sería importante esclarecer cuanto antes qué es lo que sucede con la formación continua en unos momentos como los actuales en los que hay tanta necesidad de reciclar a los miles de trabajadores que son expulsados de la construcción para que puedan trabajar en otros sectores en lugar de engrosar las filas del paro.

Igualmente importante sería transferir los recursos de la formación laboral continua a las comunidades autónomas, tal como ha dictaminado reiteradamente el Tribunal Constitucional, ya que posiblemente una mayor descentralización contribuirá a una mejor utilización de estos.


fuente:http://empleomagazine.clasificados.es/el-dinero-de-la-formacion-profesional


1 comentario:

Maribella dijo...

GUADA YA NO ES SÓLO QUE ESE DINERO NO SE HAYA USADO O QUE LA FORMACIÓN PROFESIONAL VAYA A SUFRIR RECORTES. LLEVO APENAS 3 DÍAS EN UN CENTRO DE FP Y YA DETECTO LAS ANOMALÍAS, TANTO A NIVEL EDUCATIVO COMO EN MATERIA DE RECURSOS. CUANDO ALGO ESTA PODRIDO ES DIFICIL INTENTAR SANEAR. LA FORMACIÓN PROFESIONAL NECESITA UNA NUEVA REESTRUCTURACIÓN PARA QUE PUEDA CUMPIR CON SU OBJETIVO PRINCIPAL, QUE LAS PERSONAS SEAN FORMADAS Y CAPACITADAS PARA ENCONTRAR UN PUESTO DE TRABAJO.
LOURDES ME VA BIEN, AUNQUE SON MUCHAS LAS HORAS Y POR AHORA POCO EL RENDIMIENTO.
UN BESO FUERTE