En apenas dos meses, han ingresado cien inmigrantes en la cárcel Tenerife II acusados de ser patrones de los cayucos. A algunos se les imputa el cargo de homicidio. Noventa de ellos se han puesto en huelga de hambre para protestar por esta "injusta" acusación. En la instancia escriben "por motivos judiciales".
Noventa inmigrantes subsaharianos internados en Tenerife II se han puesto en huelga de hambre para protestar por la "injusta acusación" que se les imputa, ser patrones de los cayucos en los que llegaron a las costas tinerfeñas, según ha podido saber EL DÍA de fuentes cercanas a los hechos, quienes aseguraron que la nueva directora está muy preocupada por esta situación, "muy extraordinaria, tanto por el número de personas implicadas, como por las circunstancias", según las citadas fuentes.
En apenas dos meses han ingresado en la cárcel tinerfeña cien africanos acusados de traficar con personas, al haber sido designados por la Policía como los patrones de las embarcaciones con inmigrantes, más que los detectados durante todo el año 2006, denominado como el de "la crisis de los cayucos", por la llegada de 32.000 inmigrantes en esas expediciones a las costas canarias.
La distribución de los internos de Tenerife II que actualmente están en huelga de hambre es la siguiente: 17 en el módulo dos, 32 en el módulo uno y 41 en el módulo tres.
La mayoría de los noventa iniciaron la huelga el pasado domingo. Uno de ellos, que responde a las iniciales Y.B., se desvaneció en el módulo 3, en la noche del lunes al martes. Apareció tirado en el suelo de su celda y tuvo que ser llevado a la enfermería. Tras el estudio médico se determinó que podría llevar 5 ó 6 días sin comer.
Se trata de una huelga real, porque estas personas se niegan a ingerir los alimentos del comedor y, como no tienen dinero ni reciben visitas que se los puedan llevar, tampoco pueden retirar comida del economato.
En la instancia que han rellenado comunicando hacer huelga de hambre indican que es "por motivos judiciales", en protesta por haber sido calificados de patronear el cayuco, en ocasiones, sólo porque han llevado el timón durante una parte del trayecto. Los inmigrantes protagonistas de esta huelga consideran que han sido encarcelados sin causa justificada y, algunos, si en los cayucos se han producido muertes, llevan a cuestas la imputación de homicidio.
Además, en la cárcel tinerfeña no existe intérprete y los funcionarios se ven en la obligación de acudir a otros africanos para poder entenderse con los inmigrantes.
Este aspecto es importante, teniendo en cuenta que toda persona tiene derecho a ser entendida, máxime si se encuentra privada de libertad.
Según los funcionarios, los internos de origen subsahariano se portan muy bien. No son conflictivos, siempre hacen lo que se les dice y responden con educación.
El número de internos en Tenerife II ha alcanzado un nuevo récord, con 1.650, cuando esta prisión se construyó para 700 plazas.
Por esta saturación, presos tinerfeños han tenido que ser trasladados a la Península, lejos de su familia.
Según publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE), Instituciones Penitenciarias destina 3,09 euros por preso y día para todas las comidas que realizan en la cárcel.
Tres años de prisión
Precisamente ayer, la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife condenó a tres años y seis meses de prisión a Babacar Diop, de 25 años, y Malade Diallo, de 24 años, ambos nacidos en Senegal, por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros al traer de forma ilegal a 55 personas en un cayuco a los costas de Tenerife, en concreto al puerto de Las Galletas.
Los hechos ocurrieron el 3 de diciembre de 2007, con una embarcación tipo cayuco de 14,5 metros de eslora, 2,5 metros de manga y 1 de puntual, en el que los inmigrantes estuvieron cuatro días de navegación tras partir de Mauritania.
"Los procesados realizaban la distribución de víveres y agua entre los ocupantes y adoptando cuantas decisiones propias de su cargo fuesen necesarias con la finalidad de introducir a los inmigrantes de forma clandestina", expone la sentencia.
Según la citada fuente, durante la travesía, debido al tipo de embarcación, condiciones del mar y escasez de medios, los ocupantes vieron peligrar su vida e integridad física con el resultado de una víctima mortal por deshidratación debido a las pésimas condiciones meteorológicas y, por consiguiente, una deficiente nutrición en los días de navegación "sin que estuviera previamente enfermo, tal y como señaló el informe médico forense".
Uno de los acusados, Babacar Diop, durante la vista oral admitió que si bien no tenía conocimientos de navegación, sí tripuló la nave durante el viaje.
Fuente: el dia.es
COMENTARIO: ¡QUE JUSTICIA MÁS INJUSTA! YA NO BASTA CON QUE ESTAS PERSONAS HAYAN FRACASADO EN SU PROYECTO MIGRATORIO TAN ARRIESGADO, ENCIMA TE CASTIGAN POR ELLO Y EN OCASIONES TE CULPABILIZAN DE LAS MUERTES DE TUS COMPAÑEROS DE VIAJE. PARA COLMO ESTOS "PRESOS" ESTÁN SATURANDO LA TENERIFE II.......
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