UTOPÍA

UTOPÍA

A las ONG y a los pobres del mundo

La paz del mundo es obligación de todos y todas las naciones

sin tener en cuenta credo ni religiones

esa lucha diaria, ese cansancio infinito, mano con mano

esa manta abrigadora de inmigrantes de cayucos y pateras...

¡qué triste la llegada a la costa! ¡Qué agonía de aquellos que no....

pudieron, y en la mar murieron! Porque en su tierra no podían

sacar adelante a sus gentes.

¿Dónde estás tranquilidad? ¿Dónde encuentra la paz?

¡Gracias ONG, por tus luchas constantes. ¡Oh países de oro!

¡Oh países de miseria y hambruna apegada con la muerte!

¿Qué ocurre, porqué muere tanta gente?

¿Dónde estás, ser humano?...Para ayudar tanta pobreza.

Para que esos niños desnutridos: ¡tengan escuelas!

Y su hambre desaparezca de repende, cual milagro.

Qué angustiosos noticieros, que no los puedo ver siquiera

pues mis lágrimas, bañadas de impotencia surgen en torrentes.

¡Hay una solución! Se llama "utopía eterna".

¡Gobiernos del mundo rico aporten más dinero a los

pobres y si es directamente tanto mejor.

Hospitales, escuelas, camiones y carromatos

cargados de dulces fuentes, arroz, leche, comida,

agua potable, medicamentos urgentes...

El pueblo tiene las llaves, abre puertas invisibles.

Surge la paz de repente y la eterna libertad.

Hombres, mujeres unidos ayudemos a los pueblos,

voluntarios, médicos S.F., Cruz Roja, ONG y un

sinfin de buenos samaritanos ¡qué den su mano más tierna!

Algún día en nuestra fe y serenidad, en el

camino de la vida la utopía tornárase en

proyecto latente. ¡Viva la paz en la tierra!

¡Viva toda nuestra gente!

Autor: Francisco José Hernández de la Cruz, periódico El Día, 9 de Eenro 2011, Versos, pág 56.

Fotografía: Aarón Moreno Borges