domingo, 8 de agosto de 2010

SABOR A MACEDONIA


Esa mano y esos labios conocen mi yo,
mi pudor, mi risa, mi evasión, mis palabras,
mi jadeo, mi vergüenza, mi alopecia,
mi mentira, mi certeza.
Esa mano y esos labios transmiten salud sin receta,
y proporcionan calidez, pizca de emoción, musas,
aroma a lavanda y esperanza a mi insegura bragueta.

Esa mano y esos labios, sinónimos de paz y dulzura,
al despedirse de mi, ahora plácida,
pero después difunta virilidad.

Esa mano y esos labios dan más de lo que reciben........

Desde hacía diez años, y como cada principio de mes, la mano y los labios de Olga, madura y todavía apetecible, hacían olvidar durante media hora, minuto arriba, minuto abajo, la soledad del cincuentón y viudo Narciso en el "Bohemia Club", mi "pisito", como solía decir ella.
Viejo chiquillo.
Vieja meretriz.
Casanova por un día.
Madame Bovary.

Olga, como casi siempre, fingió para sobrevivir,
vagando su imaginación por paraísos olvidados.
Narciso se desahogó, como manda la necesidad fisiológica,
sacó el consabido parné, y así pudo, otro mesecito, malvivir mejor.
Al fin y al cabo somos productos de la Ecología Humana,
pensó mientras se abrochaba el último botón de la camisa.

El servicio, diurno, incluía un agradable paseo por la playa,
cortesía de la complicidad....

La pareja, cogiditos de la mano, en ropa de baño, callados,
entre callaos y dunas de sabor volcánico, olieron el spray marino.
Comprobaron, con sus melancólicas miradas,
el cresterío del oleaje, y la basáltica escollera.
Ambos, como amigos, respondieron al unísono,
y en susurro, buscando inspiración, salvación,
que ese paisaje era tan bello como el sabor a Macedonia....
Autor y Fotografía: Aarón Moreno Borges
*Fotografía realizada en Playa Martianez (Puerto de la Cruz), donde "Narciso" y "Olga" recuerdan eso de "cualquier tiempo pasado quizás hubiera sido mejor...."


1 comentario:

Guadalupe dijo...

Me gusta...bastante...